Para Emmanuel Macron y François Bayrou, el regreso político promete ser “explosivo”

Bajo presión por su plan de finanzas públicas para 2026, el primer ministro se prepara para un incierto maratón presupuestario que comenzará en octubre. Dado que el jefe de Estado sigue siendo impopular, corren el riesgo de enfrentarse a una protesta a gran escala, cuyo primer día está previsto para el 10 de septiembre.
A diferencia de Emmanuel Macron, quien una vez más pasó unos días de vacaciones en su residencia presidencial en Fort Brégançon, en la región del Var, para François Bayrou, «no hubo descanso estival», escribe El País . El primer ministro seguramente es consciente de que este verano podría ser su último al frente del gobierno, ironiza el periódico español, ya que este se prepara para experimentar un «otoño explosivo». Desde octubre hasta finales de 2025, François Bayrou y sus ministros «tendrán que afrontar tres meses de maratón presupuestario», explica el diario madrileño.
Anunciado a grandes rasgos a mediados de julio, el plan presupuestario bearnés para 2026, que prevé reducir el déficit público mediante numerosos recortes presupuestarios, ha suscitado diversas oposiciones políticas, tanto de izquierda como de extrema derecha, de las que depende para mantener su cargo. «El debate en la Asamblea promete ser tormentoso y podría hacer caer al gobierno», resume la periodista Raquel Villaécija.
Fue este mismo desafío presupuestario el que hizo caer a su predecesor,Michel Barnier , en diciembre de 2024, quien se vio obligado a intentar que el proyecto de ley se aprobara con el artículo 49.3, es decir, sin el voto de los diputados. "El actual Primer Ministro
Courrier International